Mascotas exóticas, una moda que crece

A la tradicional adquisición de animales domésticos (perros, gatos, aves, peces) se suman otras especies, algunas autóctonas, otras originarias de diversas latitudes.

Adquirir un animal de una especie en protección, o de las comúnmente conocidas como peligrosas, presuponen un riesgo con consecuencias que -en muchas ocasiones- no son consideradas por los adquirentes.

Desconocidos…. Peligrosos?

Por ejemplo, una mascota exótica cada vez más popular es el hurón. Durante cientos de años el principal uso de los hurones fue la caza de conejos. En España, requieren tener obligatoriamente pasaporte con chip y vacunas en regla, incluso (aunque no en todas las comunidades) es necesario vacunarlos contra la rabia. Los hurones son la tercera mascota más frecuente en los Estados Unidos, después de los perros y gatos. Y cada vez son más adquiridos para vivir en el hogar en países de Sudamérica.



Otra especie llamativa y atractiva por la ternura que genera su estética es el Erizo bebé. Los erizos, son animales domesticados, originarios de África del Norte, España y Sur de Francia. Por su tamaño pequeño, de 10 a 16 cm. de largo y de 300 a 400 gr. de peso, y sus interesantes hábitos alimenticios ha ido ganando popularidad entre los aficionados a las mascotas exóticas. Los erizos son nocturnos por naturaleza.

Muy de cerca en el estilo y manipulación que permite, están las múltiples variedades de Cobayos, destacándose actualmente –por imposición de la moda- el cobayo peruano de pelo largo.

Exóticos, de moda y para todos los presupuestos

Décadas atrás, para contener la picardía o conducta de un niño solían asustarlo con algún animal para lograr su obediencia. Hoy, difícilmente este sea un argumento válido cuando encontramos ofertas de Tarántulas entre 10 a 25 dólares. Cobayo peruano de pelo largo, entre 35 y 60 dólares. Iguanas, camaleones, lagartos, serpientes, ardillas, escorpión, batracios, dependerá de la especie y procedencia. Cría de hurón, con 40 días de vida, a 300 dólares en dos pagos.

Y la lista es larga y sorprendente por el origen de su especie y por su costo. Pero, como indica una máxima de la economía, la demanda genera oferta y para todo hay mercado.

fuente: diariocronica.com.ar

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